Detalles, Ficción y Pasion Paraguaya
Recién en el segundo suelo, en la puerta que tenía marcada para ingresar, me pidieron por primera ocasión el ticket, aunque nadie lo registró con un leedor digital. En los balances de los organizadores, seguramente, mi entrada no aparezca marcada. La visión de Nicolás, que alguna ocasión fue chofer de camión en Itapúa, no se detuvo allí.